martes, 5 de febrero de 2013

Vida después de la muerte: obra nueva con materiales recuperados.

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La necesidad obliga la mente a ser creativa, ante una economía cada vez mas ajustada y limitada, nos damos permiso en considerar propuestas que florecen en las ideas innovadoras de las 3R’s.

Las tendencias actuales se enmarcan en la nueva tipología de comercio que surge de los residuos como negocio. Todo lo que antes desechamos, hoy es valorado y considerado un “bien muy preciado”.

La crisis mundial que emana con el cambio climático acelerado, la sobreexplotación de la materia prima a partir de recursos naturales no renovables y la sobrepoblación del planeta, nos obliga a transformar los hábitos de consumo y costumbres, modificando nuestro estilo de vida.


Estas transformaciones son impulsadas por la inestabilidad financiera, y la preocupación de un futuro que promete todo menos abundancia en la forma conocida. Nuestra realidad… asimilar que vivimos en un planeta finito y exiguo.

En la República Dominicana ya es práctica, previo a la demolición de una obra, recuperar todos los elementos que puedan reutilizarse en otras obras de menor presupuesto, ó dispuestos para su posterior reciclaje.

En la actualidad, el poder adquisitivo del dominicano se reduce significativamente, encontrando nuevas oportunidades en los productos usados, lo que indirectamente nos induce a ser “ECOconsumidores”.

Las mercancías en madera y hierro, son preferidas por ser reutilizables casi en su totalidad. Puertas, ventanas, protectores, armarios, revestimientos, mesetas de cocina, fregaderos, baños completos, entre otros, ofrecen al consumidor una posibilidad mas económica para la construcción de nuevas obras.

Se ha hecho moda la venta de garaje y los comercios de muebles usados, incluso mobiliarios elaborados con piezas recuperadas de objetos que cumplieron su vida útil para lo que fueron fabricados.

Así apreciamos ideas brillantes, resultado del reciclaje y reúso, lámparas de botellas de vidrio, muebles realizados con paletillas de ferretería, mesas de restos de puertas, muros divisorios con botellas plásticas, por citar algunos ejemplos.

Los Eco-diseñadores descubren en los desechos habituales, la materia prima para fabricar sus fantásticas creaciones, en estos tiempos donde el lujo pasó de ser la tenencia de costosos objetos de difícil adquisición, a piezas artesanales divertidas, ricas en originalidad e ingenio.

En el próximo artículo ampliaré sobre la reutilización y el reciclaje de elementos constructivos y estructuras…


Escrito por: María Isabel Serrano Dina 
-Publicado Martes 5 de Febrero 2013, periódico La Información, Santiago, Rep. Dom.-

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