"Yo no veo el mundo como es, veo el mundo como soy"

"Yo no veo el mundo como es, veo el mundo como soy"

martes, 20 de agosto de 2013

Un Santiago, dos realidades.


Dice un dicho que no hay mayor sordo que aquel que busca sus propios intereses y se tapa los oídos. Lamentablemente vivimos una época difícil, atrapada entre la indiferencia y desinterés de los Santiagueros, si aun podemos decir que lo somos, y el autismo oportuno de las autoridades locales.

Resulta asfixiante observar la superficialidad de vida que hemos adoptado, solo nos interesa producir dinero, mas que para vivir dignamente, con el único propósito de competir con el entorno… y por supuesto PODER.

La sociedad actual sufre una decadencia en valores inaceptable, todo lo mueve papeleta; de ser fruto de una familia forjada en valores y principios, pasamos a la familia “moderna” cada quien a lo suyo, el Amor para otro momento.


Santiago está huérfana de dolientes, y ante la indiferencia de sus habitantes, solo preocupados por adquisición de bienes materiales, las autoridades locales navegan en un mar sin olas, a bordo de un velero que pagamos todos los indiferentes que aportamos al estado.

De igual manera es alarmante el futuro previsible de la “ciudad corazón” de continuar sumida en esta dosis de indiferencia y autismo, pareciera que la indiferencia de los Santiagueros fue adquirida con prescripción médica y sin antídoto…

Es inevitable sentirse indignada y preocupada por tal combinación, ¿A qué se debe la transformación negativa de una ciudad que enorgullecía su gente por su historia, su cultura, sus grandes revolucionarios y revolucionarias, intelectuales… una sociedad ejemplo para el país? ¿Será que un “virus” nos contagió la apatía?

Mientras sufrimos de este mal, nos roban la ciudad en las narices; lo que mas cuesta entender es nuestra capacidad de adaptación y tolerancia ante el descarado crimen autorizado.

Vivimos en un Santiago con dos realidades: el Santiago del que todo está bien, no me he dado cuenta, no tengo tiempo, no veo noticias, eso es lo que hay y no es mi problema; y el Santiago sumergido en basura, en proceso de perder su capacidad de habitabilidad por la mala administración pública de nuestros recursos, la tala indiscriminada de árboles, el “loco” proyecto del Yaque, el crecimiento mal planificado e insostenible de la ciudad, la contaminación ambiental… larga lista.

En el Santiago del primer grupo también habita el Alcalde junto con todos sus abanicos y demás instituciones autistas, muy convenientemente, además de valerse de estos habitantes indiferentes para apropiarse de las decisiones de todos, el Sr. Alcalde asumió un mundo ideal en el cual se ha dado al afán de invitar los incrédulos a dar un paseo guiado por su Santiago paralelo, incluso a los mismo Santiagueros… esto deja mucho que pensar del Sr. Alcalde y sus discípulos, lo que es tan evidente no requiere palabras, a pesar de la publicidad paga para todos los residentes de esta ciudad es palpable el nivel de descomposición del que Santiago se hace notar por la basura.

Sr. Alcalde, la costosa publicidad de que presume con nuestros recursos, no le ayudará en difuminar la proyección de una ciudad que pierde su brillo por sus antojos no prioritarios, por encima de las necesidades de aire limpio para respirar.

La impotencia ante la arrogancia del que se piensa eterno en su mundo etéreo. ¿Y nosotros sociedad civil, seguiremos pagando el alto costo de nuestra indiferencia?  ¿Cuántos veleros mas financiaremos?

Santiaguero hágase el favor y reaccione, salga de su burbuja, su ciudad le necesita. Santiago es de Todos.


Escrito por: María Isabel Serrano Dina 
 -Publicado Martes 20 de Agosto 2013, periódico La Información, Santiago, Rep. Dom.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario

By Serrano ecodiseño y soluciones sostenibles

By Serrano ecodiseño y soluciones sostenibles
La información contenida en esta página es resultado de mi experiencia laboral y trabajos de investigación, con acreditadación Nacional e Internacional. Derechos de autor reservados. El uso de estas informaciones requieren cita a la autora.