Como resultado del fracking la producción de gas natural se
postula en aumento hacia el 2030, a pesar de su terrible impacto ambiental y
las controversias que ha generado la gran cantidad de perforaciones que se
llevan a cabo para extraer petróleo. Del gas natural también se puede obtener
otro combustible de quemado limpio, un alcohol llamado metanol. Este alcohol es
el resultado de la mezcla de hidrógeno y dióxido de carbono, de los residuos de
dióxido de carbono se puede obtener metanol carburante. En Islandia existe una
empresa que convierte estos residuos en metanol tomando el CO2 del vapor
geotérmico natural combinado con hidrógeno hecho a partir del agua.
También de la biomasa se puede producir metanol, la biomasa puede
ser residuos de madera, de jardín, residuos agrícolas, residuos sólidos
locales, residuos de mataderos en grasa, aceites y cualquier tipo de residuos
orgánicos. Por ejemplo, 1 billón de toneladas de biomasa puede producir 210
billones de galones de metanol aprox. Esto permite que el metanol pueda costar
60% menos que la gasolina siendo además menos contaminante.
Al igual que el etanol, el metanol también es compatible con la
gasolina. Ya muchos países como el mismo Estado Unidos están vendiendo mezclas
de gasolina con etanol y metanol para reducir sus niveles contaminantes y
también su precio.
Otra posibilidad son los vehículos eléctricos. Con la primera
guerra mundial en que los vehículos de guerra funcionaban por combustión, el
científico Nikola Tesla desarrolló
grandes inventos y quizás el más importante fuera el revolucionario
motor eléctrico. Desde entonces el auto eléctrico intenta competir en el
mercado con los vehículos tradicionales que funcionan a base de combustibles
fósiles.
Vehículos movidos solo por baterías que pueden cargarse con el sol
o con un conector eléctrico convencional, vehículos híbridos eléctricos y de
gasolina o gas y gasolina. Cada año
mejores en eficiencia y rendimiento, prácticamente todas las marcas de vehículo
han lanzado su línea eco y con precios competitivos.
Las opciones de mercado para el consumidor que busca economía y
menos emisiones por kilometraje están, ahora nos falta disponer las estaciones
de servicio que permitan abastecernos.
Es interesante estudiar la República Dominicana y su fuerte
dependencia al petróleo, uno de los países con el combustible mas caro es este,
y sin justificación real.
La industria petrolera vive una época difícil, el precio del
barril de petróleo se ha desplomado en un 50% este año, en gran parte debido al
aumento de la producción de los Estado Unidos y a la baja en la demanda de
países europeos y de China. Esto es algo muy positivo, pues cada vez más son
los países que se suman a reducir su dependencia del petróleo, lo que ayuda a
equilibrar los precios del mercado global. Pero la situación del petróleo es
inestable e incierta, el reciente rompimiento de relaciones entre Irán y Arabia
Saudita complica el panorama mundial.
Con precios tan bajo, gran porcentaje de las explotaciones no
son rentables, siendo las mas afectadas las reservas de difícil acceso por sus
costos operativos. Un barril por debajo de los US$100 explotado en zonas de
mucha profundidad como en el mar del norte y el ártico, pone en riesgo la
industria.
Incluso las operaciones de fracking en Estados Unidos para
obtener gas y petróleo de esquito se están viendo amenazadas por la relación
entre su costo de producción y la caída de los precios de este año. Y por
supuesto, esto genera un efecto dominó en todos los productos servidos que
dependen del petróleo.
Nos estamos encaminando a un futuro de opciones, quizás se podría
hablar que antes de agotarse los yacimientos de petróleo que nos quedan, por
diferentes razones estamos haciendo un giro a favor de combustibles mas
ecoamigables y energía limpia, que ayuden en la reducción de la huella de
carbono en el ambiente, sus ecosistemas y con la raza humana.
Escrito por: María Isabel Serrano Dina
-Publicado Martes 5 de Enero 2016, Santiago, Rep. Dom.-
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